Necesito un tiempo de vacío. Un tiempo que no corra,que se pare. Un vacío de tiempo. Que detenga el mundo y deje mi mente vagar por parajes todavía sin explorar, que pueda entenderme mi entendimiento.
Pero todo se parece demasiado a una vida sin emoción. Una sociedad lesiva e impertérrita que camufla sus carencias mediante falsas virtudes, como una cortina de humo que se desvanece entre calada y calada.
Tal vez un día,despierte del sueño, y pueda entender a esos locos de risa torcida. Una comedia que no entienden. Una locura demencial incontrolable.
Y ese día estaré ahí,para imaginar una incontrolable carcajada nacida desde lo más profundo del odio, la venganza... y la razón.
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