Ayer

Es sólo una,como las verdades que me cuenta tu sombra. Sólo la realidad más difusa entre tantas capas de fantasía,que se acababan confundiendo con un sueño.

Pero es curioso,cómo la indecisión vive en lo más nefasto de nosotros mismos,en esos etéreos sueños,esperando que nos metan la vida por el culo para salir corriendo por donde menos te lo esperas. Huye de nosotros,por supuesto. De nuestras insulsas capas de superficialidad banalizadas con el paso de las casualidades.
Dejad la suerte a un lado. En un mundo de almas cebadas de miseria moral,no puede existir sino la falsa felicidad que anhelan vuestras mediocres mentes.
Dejad el mundo en paz,marchaos y no volváis. Ésta es una nueva época para los soñadores.

Soñadores de corazón,pero humanos al fin y al cabo,que se guardan lo mejor y lo peor para ellos solos.

A veces es necesario,no es fácil ser tú,ni yo tampoco. Vuestro dios os puso ahí porque quiso. Yo simplemente tuve la desgracia de nacer sin un reflejo en el que ahogarme. No necesito creer en nada para seguir un camino hacia mi sueño. Sólo necesito a alguien.

Y sólo así,te quiero,y tendré que aprender a vivir en dos mundos demasiado distintos para ser verdad,y a guardarme sólo lo peor.
Lo mejor,lo dejo para ti.