viernes, 14 de julio de 2017

Adiós

Hasta que la muerte nos separe, no seguiremos siendo más que la necesidad de dependencia mutua que nos movía en un principio, el ser uno sólo que movía cada mitad de nuestro corazón continuamente. Para qué querríamos más, pudiendo completar lo que sentimos a través de un velo transparente de reciprocidad, sabiendo que lo que necesitamos para mantener nuestra mitad es sólo la voluntad de querer.

Aunque a veces no es suficiente. 

Despedidas necesarias que se tornan amargas. Hasta que la muerte nos separe. Hasta que el corazón nos una. Tal vez nunca más.

No hay comentarios:

Publicar un comentario